Muy desenvuelta y expresiva, ha decidido que de mayor será periodista, como su padre.
“Todos los años, el día 14, en el patio de mi colegio, las mayores plantan una falla y realizan una fiesta muy divertida. Este año iré con toda la Corte de Honor”
Lucia Andrés Zarapico, una encantadora niña de once años, es este año la Fallera Mayor Infantil de Valencia.
Dulce, inteligente, despierta, son algunos de los muchos calificativos y virtudes que adornan a la pequeña, que vive uno de los sueños mas hermosos de su vida, ser la Fallera Mayor de todos los niños y niñas valencianos.
Estudiante de sexto curso de primaria, muestra una gran madurez. Si hubiera que buscar una niña plenamente relacionada por ella misma y por su familia con el mundo fallero, difícilmente se podría encontrar otra persona que la superara.
Lucía, que precisamente fue proclamada Fallera Mayor Infantil el día de su santo, un magnífico regalo que nunca olvidará, pertenece a una familia que rebosa valencianía y espíritu fallero a raudales.
Manolo Andrés Ferreira, su padre, es una personalidad en el mundo fallero, conocido como uno de los mejores y más entendidos comentaristas, siendo el responsable de la información de fiestas y costumbres valencianas en el diario decano, en Las Provincias, además de colaborar en diferentes programas radiofónicos.
Su madre,Encarna Zarapico, ya formó parte de la Corte de Honor de la Fallera Mayor de Valencia en el año 1969, cuando ocupó el trono, además de vivir todos los años intensamente las fiestas de San Vicente Ferrer en la popular parroquia de San Valero, de Ruzafa.
El abuelo de Lucía,Rafael Zarapico, es toda una institución en el mundo fallero. Él fue el autor de los textos que más o menos adaptados a los tiempos vigentes sirven para exaltar a las falleras mayores de Valencia, y su voz, durante más de treinta años, a través de Radio Valencia SER, ha sido el eco de todo cuanto ocurría en los casales, en el ambiente fallero.
¿No te asustan tantas y tan importantes personas del mundo de las fallas a tu alrededor? ¿No te agobian con consejos y advertencias?
- No, son un ejemplo para mi. Ellos me han enseñado a querer a Valencia, a vivir sus fiestas, sus costumbres. Es una suerte enorme que he tenido, pero nunca me dicen lo que tengo que hacer. A mí me gusta observar.
Lucía, a pesar de su corta edad, ya ha ocupado el puesto de Fallera Mayor de la falla Antiguo Reino-Duque de Calabria, su hermano Manolo también ha ostentado la presidencia, y la pequeña hace cuatro años presidió las fiestas que el barrio de Nazaret dedicó a San Nicolás.
Allí, ya su figura se desveló como una niña plena de encanto, con un perfil muy característico de nuestra tierra y con una inmensa gracia y estilo al vestir las galas valencianas.
Lucía estudia en el colegio Loreto, es buena estudiante, aplicada y ordenada. Ahora, sin embargo, durante estos días tendrá que dejar el colegio y estudios. No da abasto a tanto acto.
- En el colegio se han portado de maravilla. La directora, Carmen; mi tutora, todas mis profesoras; Sonsoles, que es mi tutora; mis compañeras se han volcado conmigo. Se dá la casualidad que otra compañera mía, Raquel Bernabeu, pertenece a mi Corte de Honor y nos llevamos muy bien. Todos se han portado muy bien con nosotras. Estoy muy ilusionada en la fiesta del próximo día 14. Todos los años en el patio del colegio las mayores plantan una falla y realizan una fiesta muy divertida. Este año iré al colegio con toda la Corte de Honor para disfrutar de esa mañana tan especial.
¿Te sacarán?
- No lo sé, eso es cosa de los mayores, aunque a las profesoras las sacan en plan de crítica a todas, incluso a las monjas.
Lucía está siempre muy atenta: en las conservaciones, en los actos, en cualquier lugar. Sabe que aunque sea la Fallera Mayor de los pequeños tiene que comportarse como una persona mayor.
¿Ya tienes todos los trajes preparados?
- Si, me los ha confeccionado Enrique Marzal, que es para mí como un tío y nos quiere mucho.
¿En el día de tu Exaltación lucías un traje precioso que sorprendió a todos por su belleza, de color azul antiquísimo; ¿Cómo van a ser el resto?
- Todos están confeccionados con telas de Rosa Garín. En total este año me voy a hacer diez trajes, por supuesto que todos me los hará Enrique Marzal.
¿Diez trajes?
- Si, mi madre está muy ilusionada.
¿Quién ha elegido las telas?
- Entre mi madre y yo, aunque también ha opinado Enrique Marzal. De los diez trajes, siete son espolines. A mí me gustan mucho.
¿Alguno en especial?
- Además del traje del día de la Exaltación, que volveré a ponerme, como es tradición, el día de la Ofrenda, le tengo mucho cariño al Valencia que estrené la noche de la cridà.
Lucía vive la fiesta, se ilusiona hablando de los trajes, de sus complementos, de los actos.
Con tanto traje, Lucía, ¿tendrás ganas de que hayan muchos actos, aunque acabéis reventadas?
- Qué va. Es muy divertido. A veces sí que nos cansamos, pero ya lo sabíamos. Además, como somos las trece muy buenas amigas, hablamos, jugamos, nos reímos. Lo pasamos muy bien.
De los muchísimos, que aún me quedan, ¿qué actos te atraen más?
- La plantá, y, por supuesto, la Ofrenda de Flores. La noche de la plantá es única. Hace dos años llovía, pero a mi no me importó y me quedé junto con mi hermano, que era el presidente , para ver cómo la traían a trozos; la montaban cuando podían. La Ofrenda es tan bonita, además en mi casa somos muy devotos de la Virgen de los Desamparados y eso ya me emociona de pensarlo.
Lucía, hablando, moviéndose, expresándose, no parece una niña de once años, sino mucho mayor.
¿Ya han pensado qué te gustaría ser de “mayor”?
- Por supuesto, periodista.
No lo duda ni vacila, con toda la firmeza de su voz enérgica lo afirma con rotundidad.
¿Periodista también de fiestas?
- ¿Por qué no? Me gustaría seguir como mi padre, como mi abuelo, y además de lo que estoy aprendiendo desde que soy Fallera Mayor, aún me ilusiona más.
¿Prensa, radio? (como si fuera a entrar mañana a cualquier medio, responde muy convencida.)
- Prensa escrita, me da igual. Si cae algo de televisión, bien; pero creo que lo que por ahora más me atrae es escribir. En el colegio ya escribí un pequeño librito y ahora una falla me ha pedido un artículo para su llibret.
Sus ojos profundos observan con intensidad; su mirada, cariñosa y tímida a la vez, se alarga más allá de lo inmediato. Lucía es una niña que además en cualquier acto pone todo su corazón, se desvive por su Corte de Honor, y eso sí sabe a la perfección lo que hay que hacer.
Lucía, ¿qué les dirías a los niños valencianos?
- Que se lo pasen muy bien y que se hagan todos falleros si aún no lo son.
Éste es el deseo de una niña que durante este año 1996 es la reina del mundo infantil de Valencia, es la Fallera Mayor Infantil.